Cloro gaseoso, fórmula química Cl₂. En condiciones normales de temperatura y presión, es un gas altamente tóxico con un fuerte olor irritante y un color amarillo verdoso. Es asfixiante y tiene mayor densidad que el aire. Es soluble en agua y soluciones alcalinas y es fácilmente soluble en disolventes orgánicos (como disulfuro de carbono y tetracloruro de carbono). Es fácil de comprimir y se puede licuar en un cloro líquido aceitoso de color amarillo verdoso. Es uno de los principales productos de la industria cloro-álcali y puede utilizarse como oxidante fuerte.
Cuando se mezcla hidrógeno gaseoso con una fracción de volumen superior al 5% con cloro gaseoso, puede existir riesgo de explosión si se expone a una luz intensa. El cloro gaseoso es tóxico, invade principalmente el cuerpo humano a través del tracto respiratorio y se disuelve en el agua contenida en la mucosa, lo que puede causar daños a la mucosa respiratoria superior. El cloro puede sufrir reacciones de sustitución y adición con sustancias orgánicas e inorgánicas para generar diversos cloruros. Se utiliza principalmente para la producción de plásticos (como PVP), fibras sintéticas, tintes, pesticidas, desinfectantes, disolventes blanqueadores y diversos cloruros.
En la industria electrónica, el cloro gaseoso de alta pureza se utiliza principalmente para grabado en seco, fibras ópticas, crecimiento de cristales y oxidación térmica.